domingo, 23 de febrero de 2014

Rómulo y Remo

Empezamos #tengounmito :) Los invitados mitológicos de hoy serán Rómulo y Remo. ¡¡Un aplauso para ellos!!

Antes de hablar propiamente de los chicos, repasemos su árbol genealógico. Para ello, hay que irse a Troya, con Eneas.

Eneas, hijo de Venus y Anquises, se salvó por los pelos en la guerra porque Mercurio le trajo este mensaje de Júpiter: “Funda una nueva Troya”. Claro que no le dijeron dónde, así que al pobre Eneas le tocó ir por todos los mares conocidos, sin rumbo claro. Los dioses, siempre tan chistosos... Encima Juno se la tenía jurada a los troyanos y, por ende, a Eneas, con lo cual lo tenía muy fastidiao. Le hizo desembarcar en Cartago, con Dido. 

Dido y Eneas, mi historia mitológica favorita de amor... Trágica como pocas, explica el odio eterno entre cartagineses y futuros romanos. Otro día que estemos de romanticismo subido hablamos de los amores de Dido y Eneas, ¿vale? Seguimos con Eneas, antepasado de los gemelos.

Eneas, previa parada en los Infiernos, descubre dónde debe fundar la nueva Troya: en Italia. Pero claro, allí ya había gente. Un pequeño inconveniente... Bajar a los infiernos -mitológicos o los de cada día- siempre resulta tan ilustrativo... ¡Pa' que luego me pregunten para qué sirven las Clásicas!

En Italia había un rey llamado Latino, con una hija, Lavinia. Le había dado su mano a un autóctono, Turno, del pueblo de los rútulos. Turno, ese nombre con el que se pueden hacer bromas hasta hartarse... Así que desde aquí mi petición: no pongáis Turno a vuestros hijos.

El rey Latino -de aquí la zona central de Italia, el Lacio; hay también un equipo d fútbol, ¿no?- en cuanto ve a Eneas, decide hacerlo su yerno. Latino rompe la promesa a Turno -"Turno, espera tu turno" "Se te ha pasado el turno, Turno" "Cambio de turno, Turno" #chistaco #dinoaturno
Turno, obviamente, se cabrea como una mona y le declara la guerra a Eneas y sus compañeros. (SPOILER: gana Eneas y se queda con la chica).
Tenemos testimonio gráfico del momento en que Eneas machaca a Turno. ¡Pobritin mío! ¿No os da penina?



Eneas se casa con Lavinia y funda una nueva ciudad, nombrándola como su mujer, Lavinium. Pa' morirse de amor con Eneas <3 #losromanticos

Eneas, por cierto, venía con un hijo de un matrimonio anterior. El chaval se llamaba Ascanio pero, al llegar a Italia, le llamaron Julo. ¿Que por qué el cambio de nombre? A Virgilio le venía de maravilla para emparentar la dinastía Julia -J. César, Augusto- con dioses como Venus; ahora que también pudo ser porque Ascanio era un adolescente en crisis de identidad, un rebelde sin causa... ¡Vaya usted a saber!

Ya de mayor, Julo se marchó de Lavinium a fundar otra ciudad, llamada Alba Longa.Uno de los descendientes de Julo fue el bisabuelo de los gemelos, Procas. Éste tenía dos hijos, Numítor y Amulio. Al morir, le tocaba heredar a Numítor, pero Amulio decidió dar un golpe de estado -Amulio, ese nombre de matón de patio de colegio... Amulio y Turno, el primigenio "Dúo Sacapuntas"-. Encerró a Numítor en prisión y mató a sus hijos varones, no fuera que alguno vengara a su padre el día de mañana.

Había una chica, Rea Silvia. Amulio decide no matarla pero la convierte en vestal, sacerdotisa de la diosa Vesta, obligada a la castidad so pena de muerte -históricamente, existían en Roma las Vestales y las acusadas de romper el celibato eran enterradas vivas. Esto no es un mito, amiguitos-. Rea Silvia no daría, pues, varones que vengaran a Numítor. Todo controlado, ¿no? No contaba Amulio con Marte, dios de la guerra y un poco del amor.

Y es que dice el mito que Marte dejó de hacer la guerra y se puso con el amor en cuanto vio a Rea Silvia. Y ¿qué es una prisión para un dios? ¡NA! Tenemos foto del momentazo entre Marte y Rea Silvia!


Rea Silvia tiene cara de asustadilla, pero, oiga, es que impresiona mucho ver de repente un dios en tu celda ¡y con cuerpo de jota! Marte no yerra el tiro: la deja embarazada de gemelos, nuestros queridos Rómulo y Remo #artista #punteria #porlosegao #tengounmito

Embarazada y encerrada; Amulio, que no la mató porque, siendo Vestal, no tendría hijos jamás. Rea Silvia inventa lo de "Houston, we have a problem". No me preguntéis cómo, pero consigue llevar de incógnito el embarazo y darlos a luz sin que Amulio se entere ni ninguna Vestal se lo chive. Decide meter a sus pequeñines, envueltos en ricas ropas, en una cestita y arrojarlos al río Tíber: mejor en manos del Destino que no de Amulio. Quiso el Destino que el río aflojase su corriente y dejase la cestita con los gemelos en tierra seca, donde habrá la Urbs, la Ciudad Eterna, Roma.

Los bebés, como no podía ser de otra manera, se ponen a llorar. ¡Y mirad quién les viene a cuidar y a alimentar!



Al pasar unos días, un pastor, Faústulo, se fija en el extraño recorrido que hace esa loba y decide seguirla. ¡Flipa en colores, claramente! Faústulo lleva a los niños a su casa y los cuida como suyos junto con su esposa Aca Larencia. Otra hermosura de nombre, ¿verdad? #NO

Loba en latín es 'lupa', que hacía también referencia a 'puta'. Los padres de la iglesia católica decidieron que en realidad no había loba y empezaron a decir que Larencia era una lupa pero de las que andan a 2 patas. Nada de eso, tuiteros míos: el mito es claro y la iconografía también. Los romanos no se andaban con historias: si hubiera sido una puta, lo hubieran dicho sin más. Mirad la representación.


Los gemelos crecen. Se les da de maravilla la cacería, como a su papi. Un día cazan un ciervo con un arco. Pero al ir a recoger la flecha, se encuentran con los soldados de Amulio, diciendo que esa flecha era de ellos y, por tanto, el ciervo era del rey. Los ricos, abusando desde siempre...

Se produce un rifi rafe del copón y Remo acaba en el cuartelillo. Rómulo vuelve a casa a contarle a Fáustulo lo ocurrido. Fáustulo le confiesa sus verdaderos padres y le anima a liberar a su hermano y darle a Amulio por donde amargan los pepinos. ¡Dicho y hecho! Rómulo libera a Remo, mata a Amulio y vuelven a poner en el trono a Numítor, su tío verdadero. Happy ending? Esperaos, tuiteros míos...

Rómulo y Remo se van a fundar otra ciudad allí donde el Tíber abandonó su canastilla cuando eran unos churumbeles. Empiezan los desacuerdos: tienen diferencias respecto a la zona exacta de fundación. Deciden consultar los augurios, es decir, el vuelo de las aves. Remo ve 6 pájaros -juraría que eran buitres- y Rómulo, 12. Gana Rómulo y decide el sitio exacto de la nueva ciudad, pero Remo tiene mal perder. Cuando Rómulo está trazando en el suelo los límites de la ciudad, Remo se ríe de él y los cruza. Rómulo, que no sabía qué era una broma, lo mata -estáis todos asociándolo con Caín y Abel, ¿verdad? ¡Así me gusta, clase!-.

A partir de ahí, Rómulo funda en solitario Roma, llamada así por su fundador -si no, hubiera sido Rema (espacio para chistes malos).

Fin de la historia de Rómulo y Remo, los primeros gemelos q (se) golpearon dos veces ;) #tengounmito


Como siempre, GRACIAS por estar aquí leyéndome.